Como ocurre cada año, se llevo a cabo la megaexposición Expocultura, donde se presentan los trabajos y aprendizajes de quienes asisten a los cursos y talleres de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de San Isidro.
En esta ocasión, Expocultura se realizó el domingo 24 de Octubre desde las 10:00 en el salón Tattersall y, según los cálculos, fue visitada por unas 50.000 personas.
Acompañado por sus hijos Melchor y Macarena, el intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse, recorrió la muestra junto a los secretarios comunales de Inspecciones, Ordenamiento Urbano y Tránsito de la Municipalidad de San Isidro, doctor Guillermo Sánchez Landa y de Desarrollo Social, Mario Alonso. Asimismo, estuvieron presentes las directoras de Cultura y Educación, Eleonora Jaureguiberry y María de los Ángeles Broggi, respectivamente, como así también la presidente del Consejo Escolar de San Isidro, Norma Balmaceda, asi como también concejales.
El primer punto del recorrido del jefe comunal fue el móvil instalado por la radio Simphony, donde fue entrevistado como en años anteriores por el ex Puma y vecino de San Isidro, Nicanor González del Solar.
Luego, recorrió los stands dedicados, entre otras cosas, al ceremonial y protocolo, comics, tallado en madera e idiomas.
Acto seguido, Posse se dirigió al escenario principal, donde el Coro de la Dirección de Educación de la comuna comenzaba a ejecutar las primeras notas de "Inconsciente Colectivo", de Charly García.
Minutos después, y previo a la actuación del Coro de Sporting Nations, el titular del ejecutivo sanisidrense se dirigió a los presentes para saludar y felicitar a los talleristas y expresar su beneplácito sobre la muestra. Asimismo, introdujo a la agrupación musical integrada por tres comunidades corales de las provincias de Buenos Aires, Chubut y Córdoba, que coordinan Mari Morgan y Juan Stafforini.
Convertido en un clásico, en esta edición también un sector del jardín estuvo reservado para la partida de ajedrez viviente organizada por la Escuela Municipal de Ajedrez, fundada en 1985 y galardonada por el Congreso de la Nación por ser la más antigua del país en el nivel municipal.
Simultáneamente a los shows, en otro escenario montado en el jardín se realizó un desfile en el que modelos de todas las edades lucieron las creaciones de moda de los distintos talleres.
Con una prolija distribución de los espacios de exhibición para facilitar la circulación de los visitantes, el pabellón Tattersall fue dividido en sectores que, enumerados en folletos distribuidos y otros indicadores visuales, facilitaron a la concurrencia acercarse al stand de su interés, y conversar con el profesor responsable de la disciplina.
Fileteado, escultura, vitrofusión, joyería, maquillaje artístico, diseño de interiores, tapices, oratoria y locución, flores de Bach, grafología y patchwork, fueron algunos de los talleres que tuvieron su stand.
Tampoco faltó el clásico sector "Hágalo y llévelo" donde los visitantes aprendieron técnicas de cestería, pintura en tela, porcelana, tapiz aborigen, acuarela y repujado en estaño, entre otras, y se llevaban lo hecho.
También mostraron sus trabajos los talleres de pilates, de ritmos continentales, de trabajo corporal bioenergético y de Tai Chi Chuan.
La danza también tuvo su espacio en la megaexposición. Desde las 14:00 desfilaron grupos bailarines de hip hop, jazz, salsa, danza árabe, folclore y tantas otras.
