Miguel Ángel D'Annibale fue ordenado obispo en concurrida ceremonia
Con la concurrencia de alrededor de 2.000 personas, entre los que se encontraba el intendente de San Isidro, Dr. Gustavo Posse, junto a a fieles de la diócesis de San Isidro y de la diócesis de Río Gallegos y a pesar de una copiosa lluvia, se llevó a cabo en el salón "Juan Pablo II" del colegio "Carmen Arriola de Marín" [Av. del Libertador 17.115, Beccar] en la noche del viernes 29 de Abril la ordenación episcopal de Mons. Miguel Ángel D´Anníbale.
Durante la ceremonia, el obispo diocesano, Monseñor Alcides Jorge Pedro Casaretto pronunció sentidas palabras hacia D'Annibale al tiempo que agradeció por todos los años que el sacerdote cumplió tareas en la diócesis.
"A lo largo de todos estos años hemos llevado adelante una profunda amistad con Miguel, que ha sido un gran servidor de nuestra diócesis", expresó Mons. Casaretto. "Lo más importante para un Obispo es ser un hombre de oración, esa es la clave de la vida episcopal. Miguel es un hombre de profunda devoción al Santísimo Sacramento y ahora va a tener muchos kilómetros que recorrer y mucho tiempo para rezar en esos viajes que hará por el sur."
"Un obispo -continuó Casaretto- es sacerdote que preside la comunión de la iglesia, una comunión que en cada tiempo tiene distintos desafíos y, el obispo tiene que corregir los errores que aparezcan, pero el obispo tiene que ser un gran rescatista, rescatar todo lo que el Espíritu siembra. En tercer lugar, el obispo es un animador de la misión que es animar a la gente a la esperanza, a seguir esperando de este Jesucristo en cuyo nombre obramos la salvación, el único nombre en el cielo y en la tierra en el que podemos salvarnos."
Por su parte, Miguel Ángel D'Annibale expresó su alegría por el nombramiento señalando que lo entendía como "un profundo y gran regalo de Dios, de su Gracia para conmigo y para con todos ustedes, para con toda la Iglesia. Sentí que lo más genuino del Evangelio, el envío, la misión, llegaba en mí, y eso me llena de gozo, me llena de alegría, mi vida, una vez más, como hasta ahora, se llena de sentido y vale la pena vivirla, vivirla así, siendo enviado por Jesús. Disfruté 25 años de vida sacerdotal en esta diócesis y los últimos diez años como vicario general colaborando estrechamente con el ministerio episcopal."
Además de agradecer a las comunidades presentes, a los sacerdotes, obispos y religiosas que participaron de la ordenación, D'Annibale continúo diciendo "Quiero agradecer de corazón, en primer lugar al Papa, Benedicto VI, por esta elección, manifestarle aquí una vez más, mi fidelidad, mi obediencia, mi comunión. Quiero agradecerles ahora, a mis hermanos obispos que me han recibido y me acaban de recibir tan cariñosamente en el colegio episcopal, todos me han dicho bienvenido, qué bueno, gracias, pero muy especialmente agradecerte a vos Jorge, tengo ganas de mirarte, ahora sí, agradecerte Jorge por presidir esta celebración, por conferirme la plenitud del sacerdocio, como hiciste hace 25 años, cuando me ordenaste de diácono y cuando me ordenaste de presbítero, gracias por tu amistad, por tu paternidad y especialmente por enseñarme, en estos 21 años, que me regalaste estar al lado tuyo, a amar a la iglesia y a servirla".
Participaron de la consagración el Nuncio Apostólico Mons. Adriano Bernardini, el arzobispo y primado de la Argentina, Cardenal Jorge Bergoglio, Mons. Oscar Ojea (Obispo coadjutor de San Isidro), Mons. Juan Carlos Romanin (Obispo de Río Gallegos), Mons. Carlos Franzini (Obispo de Rafaela), Mons. Alfonso Delgado (Arzobispo de San Juan, Mons. MarioCargnello Arzobispo de Salta, Mons. Guillermo Garlatti, Arzobispo de Bahía Blanca, Mons. Justo Oscar Laguna, Obispo Emérito de Morón, Mons. Bianchi di Cárcano (Obispo Emérito de Azul), Mons. Luis Stöckler (Obispo de Quilmes), Mons. Juan Martinez (Obispo de Posadas), Mons. Fernando Bargalló (Obispo de Merlo Moreno), Mons. Carlos Franzini (Obispo de Rafaela), Mons. Carlos Malfa (Obispo de Chascomús), Mons. Joaquin Sucunza (Obispo auxiliar de Buenos Aires), Mons. Fernando Maletti (Obispo de San Carlos de Bariloche), Mons. Antonio Marino (Obispo de Mar del Plata), Mons. EstebanLaxague (Obispo de Viedma), Mons. Carlos Tissera (Obispo de San Francisco), Mons. Virginio Bressanelli (Obispo Coadjutor de Neuquén), Mons. Pedro Laxague (Obispo Auxiliar de Bahía Blanca), Mons. Hugo Santiago (Obispo de Santo Tomé), Mons. César Fernández (Obispo Auxiliar de Paraná), Mons. Santiago Olivera (Obispo de Cruz del Eje), Mons. LuisFernández (Obispo auxiliar de Buenos Aires), Mons. Marcelo Cuenca (Obispo de Alto Valle de Río Negro), Mons. VicenteBokalic (Obispo Auxiliar de Buenos Aires), Mons. Nicolás Baisi (Obispo Auxiliar de La Plata), Mons. Joaquín Gimeno Lahoz (Obispo de Comodoro Rivadavia), Mons. Guillermo Rodríguez Melgarejo (Obispo de San Martín), Mons. Adolfo Uriona (Obispo de Añatuya), Mons. Rubén Frassia (Obispo de Avellaneda- Lanús) y Mons. Hugo Salaberry (Obispo de Azul).
Concurrieron, además, representantes de otros credos (presbiterianos, anglicanos, evangélicos y judíos), además de funcionarios públicos como el intendente de San Fernando, Osvaldo Amieiro, de Tigre, Sergio Massa, el vicepresidente del HCD de Vicente López, Dr. Guillermo Ruiz Guillermo, y miembros de la Prefectura Naval Argentina, del Colegio de Abogados de San Isidro, del Colegio de Escribanos de San Isidro, entre otros.
